A veces duele la vista en sus time-lapses nada cinematográficos, pero por lo demás, el vÃdeo del agente inmobiliario de ultralujo Alejandro Jiménez es más bien de ensueño. En cuestión de segundos visitamos esta increÃble propiedad de la actriz Sandra Bullock, a la venta por la suma de 30 millones de dólares.
Una buena suma reservada a un puñado de afortunados clientes potenciales en el mundo, pero que obviamente debe ponerse en paralelo con el hiperespacio interior y exterior, la ubicación excepcional, la variedad de especies raras de madera y mármol, la locura. diseños, la cantidad de habitaciones de gran tamaño y las terrazas, lo que sea, todas equipadas, imaginamos, como los profesionales. Pensando que su carrera no durarÃa para siempre, la heroÃna de Speed invirtió mucho en bienes raÃces y desarrolló una pasión por la arquitectura. Cada lugar que renueva tiene su propia identidad.
Sandra Bullock, ¡¡¡cabeza en las estrellas
La prueba con el Home Cinema que vemos al principio del vÃdeo, justo después de la bodega gigante transparente y de súper diseño. Del mismo modo, la sala de cine acoge en un ambiente acogedor nada menos que cuatro filas de mullidos sofás gigantes para unas 15 plazas (sin aglomeraciones...), una pantalla de muy buen tamaño y una trastienda técnica que no muestra nada (nos gusta ) dejar la zona de recepción libre de cables y objetos antiestéticos. Los más exigentes notarán un cielo estrellado, paredes oscuras (lo validamos plenamente) y un tratamiento acústico con revestimiento con grandes almohadillas en el fondo de la habitación, pero también un traje de cosmonauta en la entrada de la casa, asà como en los suegros. Planets, con obvias referencias a su papel de Ryan Stone en Gravity.