Los resultados de taquilla de la secuela de Joker son incluso inferiores a lo que preveían las previsiones más pesimistas. La película cayó un 45% en asistencia y terminó su primer fin de semana con 37,8 millones de dólares. Esto supone una caída del 40 % en comparación con la primera película, que generó 96,2 millones de dólares en ingresos durante su primer fin de semana en los cines.
Las críticas son casi unánimemente negativas y las encuestas a pie de urna son deplorables. El estudio ya lamenta no haber realizado proyecciones de prueba y se pregunta cómo Todd Phillips pudo haber tenido tal autonomía y un derecho único de revisión sobre el montaje final de su película...
DC le habría dado el corte final a Todd Phillips££££
Comienzo de la respuesta: a diferencia de la primera película en la que estuvieron involucrados ejecutivos de DC, ninguno de ellos estuvo en esta secuela. También debemos recordar que el proyecto recibió “luz verde” y avanzó mucho antes de que James Gunn y Peter Safran tomaran el control de DC. La idea de la secuela de Joker en realidad se le habría ocurrido a Joaquin Phoenix en un sueño, una idea que él y Todd Phillips luego llevaron al estudio, lo que les dejó rienda suelta, y hoy se están mordiendo los dedos. ¿Son los sueños de Joaquin Phoenix pesadillas?££££
Tres lecciones que aprender de este desastre anunciado: 1. No es Christopher Nolan quien quiere (trilogía del Caballero Oscuro). Incluso cuando le damos carta blanca a Scorsese, no siempre tiene éxito (El irlandés). 2. Hacer secuela tras secuela, escuchar los algoritmos, rehacer y rehacer, no inventar nada más, no es sinónimo de buenos resultados en taquilla. 3. Es mejor dejar los sueños de Joaquin Phoenix en estado de ensueño, porque en el cine se convierten en una pesadilla para los espectadores y el estudio.
Y si creemos en la primera reacción del actor con Lady Gaga descifrada en sus labios durante la proyección de la película en el Festival de Venecia (vídeo a continuación), también para él, Joker: Folie à Deux sería ahora una ¡pesadilla!